Tipos de cabello: ¿Cuál es el mío y cómo cuidarlo correctamente?
Tipos de cabello: Aprende a identificar cuál tienes, cuidarlo en tu rutina capilar y saber cómo elegir los mejores productos con nuestros consejos expertos.
Conocer tu tipo de cabello es fundamental para darle el cuidado adecuado y lucir un pelo sano y hermoso. Cada cabello tiene características únicas, desde su forma hasta su textura y estado, por lo que entender estas diferencias te ayudará a elegir productos y hábitos que realmente funcionen para ti. En esta guía descubrirás qué es el cabello, los tipos que existen, cómo identificarlos y cómo cuidarlos correctamente.
¿Qué es el cabello?
El cabello está formado principalmente por queratina, una proteína que le da fuerza y estructura. Cada cabello nace en un folículo ubicado en el cuero cabelludo y su crecimiento, textura y apariencia dependen de factores genéticos, ambientales y cuidados diarios. Mantenerlo hidratado, nutrido y protegido es clave para su salud y belleza.
¿Cuáles son los 4 tipos de cabello?
El sistema de clasificación más popular y reconocido se basa en la forma de la hebra (o patrón de rizo) y se divide en 4 grandes categorías, cada una con subcategorías:
- Tipo 1: Liso (Straight)
- Tipo 2: Ondulado (Wavy)
- Tipo 3: Rizado (Curly)
- Tipo 4: Afro o Coily (Muy Rizado)

¿Cómo se llama el cabello que no es ni rizado ni liso?
Se llama cabello ondulado o Tipo 2. Esta categoría se sitúa justo entre el liso y el rizado, y se caracteriza por tener una forma de "S" suave o una curva más pronunciada. El cabello ondulado puede ser una mezcla: a veces más liso cerca de la raíz y más ondulado en las puntas, o varía de un día a otro.
¿Qué tipos de cabello existen?
Esta es la clasificación detallada, que combina la forma de la hebra (1, 2, 3, 4) con la intensidad de esa forma (a, b, c):
Tipo 1 (Liso):
- 1a: Completamente liso, muy fino y brillante.
- 1b: Liso con algo de cuerpo o volumen, ni muy fino ni grueso.
- 1c: Liso grueso, a veces rebelde y con dificultad para mantener un rizo.
Tipo 2 (Ondulado):
- 2a: Ondas suaves, apenas una "S" en el largo del cabello, fácil de alisar.
- 2b: Ondas más definidas, la "S" es clara, con algo de frizz en la coronilla.
- 2c: Ondas gruesas y pronunciadas, casi rizos sueltos, con tendencia al frizz.
Tipo 3 (Rizado):
- 3a: Rizos grandes y sueltos, con patrón circular bien definido.
- 3b: Rizos con más volumen y un patrón más apretado, como resortes.
- 3c: Rizos apretados y densos, de pequeño diámetro, mucho volumen.
Tipo 4 (Afro o Coily):
- 4a: Patrón de rizo en forma de "S" muy apretada.
- 4b: Patrón en forma de "Z", el rizo no es visiblemente circular.
- 4c: El patrón más apretado, muy denso, propenso a la contracción (se encoge mucho).

¿Qué texturas de cabello hay?
Además del patrón de rizo, la textura del cabello se clasifica según su grosor o diámetro. Existen tres texturas principales que pueden presentarse en cualquier tipo de cabello (liso, ondulado, rizado o crespo):
- Cabello fino: Tiene hebras delgadas con un diámetro pequeño. Este tipo de cabello tiende a ser más delicado y puede verse sin volumen fácilmente, pero también es más manejable y se seca rápido.
- Cabello medio: Tiene un diámetro intermedio y es el más común. Generalmente tiene buen equilibrio entre fuerza y flexibilidad, y retiene bien los peinados sin ser demasiado difícil de manejar.
- Cabello grueso: Tiene hebras de mayor diámetro y es más resistente. Este tipo de cabello puede soportar más tratamientos químicos y calor, pero también puede ser más difícil de peinar y tiende a necesitar más tiempo de secado y productos más nutritivos para mantenerlo manejable.
¿Cuál es el cabello más difícil de cuidar?
El cabello rizado y afro suele ser el más difícil de cuidar porque tiende a ser seco, quebradizo y con tendencia al frizz. Requiere productos más hidratantes y nutritivos para mantener definición y suavidad.
¿Cómo saber cuál es tu tipo de cabello?
Para identificar tu tipo de cabello observa lo siguiente:
- Observa tu patrón al natural (sin herramientas térmicas).
- Revisa el comportamiento post-lavado: ¿se encrespa? ¿pierde forma?
- Toca el grosor de una hebra: ¿casi no se siente (fino) o es firme (grueso)?
- Evalúa estado actual: ¿se parte, está áspero, opaco o deshidratado? Eso define si tu foco será nutrición, reparación o hidratación.
¿Cuál es la mejor forma de cuidar el pelo?
El cuidado del cabello debe ser personalizado según tu tipo específico. Aquí te compartimos una guía práctica para cada tipo de cabello con las soluciones de la línea Hair Food de Fructis:
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Tipo de Cabello |
Necesidad clave |
Gama Garnier Fructis Hair Food |
Ingredientes / Funcionalidad clave |
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Pelo Normal |
Revitalización, ligereza y brillo. |
Sandía (Shampoo, acondicionador y mascarilla) |
Con extracto de Sandía, conocido por sus propiedades revitalizantes, para un cabello con aspecto saludable. |
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Pelo largo y frágil |
Fortaleza, menos quiebre en las puntas. |
Piña (Shampoo, acondicionador y mascarilla) |
Con extracto de Piña, ayuda a reducir el quiebre y las puntas abiertas para mantener tu largo deseado. |
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Pelo seco |
Nutrición intensa y suavidad. |
Palta (Shampoo, acondicionador y mascarilla) |
Con extracto de Palta, aporta la nutrición que el cabello seco necesita, dejándolo suave y manejable. |
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Pelo deshidratado |
Hidratación profunda y suavidad. |
Aloe vera (Shampoo, acondicionador y mascarilla) |
Con aloe vera, un ingrediente reconocido por sus propiedades hidratantes, para rellenar de agua el cabello. |
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Pelo rizado y seco |
Definición, nutrición y control de frizz. |
Manteca de cacao (Shampoo, acondicionador, mascarilla y crema para peinar) |
Con manteca de cacao, nutre, define y disciplina el cabello rizado, ayudando a controlar el frizz. |
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Pelo dañado |
Reparación y nutrición profunda. |
Coco (Shampoo, acondicionador y mascarilla) |
Con extracto de coco, ideal para reparar y nutrir el cabello dañado, devolviéndole suavidad y brillo. |
¿Cuáles son los errores comunes que se cometen al cuidar mi tipo de cabello?
Cometer errores en el cuidado del cabello es más común de lo que crees, pero conocerlos te ayudará a evitarlos:
- Lavar el cabello con agua demasiado caliente: Esto abre la cutícula y remueve los aceites naturales que tu cabello necesita, dejándolo seco y encrespado. Lo ideal es usar agua tibia para lavar y terminar con agua fría para sellar la cutícula.
- Usar productos inadecuados para tu tipo de cabello: Muchas personas usan el mismo shampoo que el resto de su familia sin considerar que sus necesidades capilares son completamente diferentes.
- Sobre-lavado: Lavar tu cabello todos los días puede despojarlo de sus aceites naturales, especialmente si tienes cabello rizo o seco. La mayoría de los tipos de cabello se benefician de lavados cada 2-3 días, aunque esto varía según tu tipo específico y estilo de vida.
- No usar acondicionador o aplicarlo en las raíces: El acondicionador es esencial para mantener el cabello hidratado y manejable, pero debe aplicarse desde medios a puntas para evitar que las raíces se vean grasosas. Las líneas Hair Food ofrecen acondicionadores específicos para cada necesidad que complementan perfectamente el shampoo.
- Descuidar las puntas de tu cabello: Las puntas son la parte más vieja y frágil de tu cabello, por lo que necesitan atención extra. Usar mascarillas como las de la línea Hair Food una o dos veces por semana puede hacer una diferencia enorme en la salud de tus puntas.